Uno de los tratamientos estéticos más demandados actualmente es el blanqueamiento dental.
Algo lógico teniendo en cuenta que es un procedimiento muy sencillo que se realiza para aclarar la coloración de las piezas dentales con el fin de conseguir un tono más blanco y uniforme en toda la dentadura… ¡y poder presumir de sonrisa!
¿Tienes antiestéticas manchas en los dientes o una coloración general de la dentadura que no es de tu agrado? No te preocupes:
En la Clínica Dental Elena Bocage de Las Arenas, realizamos este procedimiento decenas de veces al año para ayudar a nuestros pacientes a conseguir una sonrisa más saludable, brillante y hermosa.
Por eso hemos preparado este artículo para informarte sobre los requisitos necesarios para someterse a un proceso de blanqueamiento dental.
Evaluación de la salud bucal
Para poder realizarse un blanqueamiento dental es importante que, antes de nada, tu dentista de confianza evalúe detenidamente la salud de tus dientes.
Durante esta evaluación, se examinará la condición de tus piezas dentales y encías para asegurarse de que estén en buenas condiciones para poder suportar un procedimiento de blanqueamiento.
Y es que, si durante la exploración de detectan caries, enfermedad periodontal u otras afecciones dentales o bucales, será necesario tratarlas antes de proceder al blanqueamiento dental.
Solo así es posible garantizar resultados óptimos y minimizar cualquier riesgo potencial.
Si el diagnóstico tras la evaluación es positivo y no hay nada que impida realizar un blanqueamiento dental, se realizará una limpieza dental antes de proceder a realizar el tratamiento.
Historial dental y hábitos personales
Otra cosa que debe hacerse antes de someterse a un proceso de blanqueamiento dental es compartir tu historial dental con el dentista que vaya a llevarlo a cabo… si no es con el que sueles estar habitualmente.
Esto incluye informar sobre tratamientos previos, como empastes o coronas, así como indicar cualquier tipo de sensibilidad dental que se padezca o si se tienen alergias conocidas.
Es importante tener en cuenta que algunos dientes pueden no responder al blanqueamiento si ya se han realizado en ellos restauraciones dentales anteriores.
Además del historial dental, también es importante que le informes a tu dentista de tus hábitos.
Esto incluye tantos tus hábitos alimenticios como los posibles consumos de tabaco, café, té o vino tinto, que puedas realizar habitualmente… ya que estos pueden contribuir a la decoloración dental.
Expectativas realistas
Para los resultados de tu blanqueamiento dental no te decepcionen es muy importante que se te indique la realidad del resultado que se va a poder conseguir con el tratamiento, no sea que se tengan unas expectativas muy altas que sea imposible cumplir.
Y es que, si bien el blanqueamiento puede eliminar manchas y decoloraciones en los dientes, no puede alterar el color natural ni corregir problemas estructurales o de forma dental.
Por eso es tan importante que tu dentista te informe sobre los resultados que puedes esperar y te ayude a entender las limitaciones del procedimiento.
Cuidados antes y después de someterse a un blanqueamiento dental
A pesar de que el blanqueamiento dental es un proceso sencillo, es preciso que el paciente siga una serie de recomendaciones enfocadas en aumentar la efectividad del tratamiento.
ANTES: Mantener buenos hábitos de higiene bucal
Antes del blanqueamiento dental, es de gran importancia mantener una rutina de higiene bucal que incluya cepillado y uso de hilo dental. Esto ayudará a eliminar la placa que podría hacer que tus dientes sean más sensibles durante el proceso de blanqueamiento.
ANTES: Alimentación saludable
Lleva una dieta rica en frutas y verduras. Estos alimentos pueden contribuir a mantener el tejido de las encías sano, lo que ayuda a proteger sus dientes de la sensibilidad después del tratamiento.
DESPUÉS: Come alimentos suaves y poco ácidos
Los alimentos de alta acidez pueden dañar el esmalte y hacer que los dientes sean más sensibles de lo normal. Es mejor evitar los cítricos, los tomates y otras frutas ácidas hasta que tus dientes hayan tenido tiempo de recuperarse del proceso de blanqueamiento.
Esto incluye también evitar alimentos y bebidas con alto contenido de pigmentos, como café, té o vino tinto.
DESPUÉS: Usa una técnica de cepillado adecuada
Deberás cepillarte suavemente al principio hasta que tus encías hayan tenido tiempo de curarse de cualquier irritación causada por el procedimiento de blanqueamiento en sí. Y mejor si utilizas un cepillo de dientes suave. Evita también utilizar pasta dentífrica con colores fuertes.
DESPUÉS: Evita fumar
No es una buena idea fumar después de un blanqueamiento dental porque la nicotina del tabaco puede causar manchas severas en los dientes, provocar su decoloración (el tabaco contiene compuestos que pueden adherirse al esmalte dental) y causar enfermedades en las encías.
Por eso, si estás considerando realizarte un blanqueamiento dental, este puede ser el momento perfecto para dejar de fumar y mejorar no solo la apariencia de tus dientes, sino también tu salud en general.
Resumiendo…
Si te has hecho un blanqueamiento dental, es importante que evites fumar y otros hábitos que puedan dañar tu sonrisa hasta al menos una semana después del tratamiento o hasta que tu odontólogo lo autorice.
Además, es posible que también se te recomiende utilizar productos de mantenimiento, como geles blanqueadores o enjuagues bucales especiales, para mantener tu sonrisa blanca y brillante el mayor tiempo posible.
¿Quieres realizarte un blanqueamiento dental?
En la Clínica Dental Elena Bocage de Las Arenas estaremos encantados de estudiar tu caso y presentarte el plan de blanqueamiento que mejor se ajuste a tus necesidades.
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